0

Wake up

Estoy esperando. Esperando a que ocurra algo que me despierte. Llevo mucho tiempo dormida. Pero sin soñar. Y no consigo despertar. Vivo en el pasado, reviviendo una y otra vez escenas. Vivo de cara al futuro, haciendo planes y más planes. Trato mi presente como si fuera un recuerdo. Colecciono recuerdos, historias que poder contar. Creo saber que antes era feliz. Quiero creer que seré feliz más adelante. Y eso me impide serlo ahora.
-Please, wake up.
0

Flash!

Conectando. Conectando. Conectado. Flash!
Sí, ya estoy otra vez, la vida es una caca. Ahá. Roleemos.
Ah, vale, no pasa nada. Hablaremos otro día, pues.
Oh, tú. Te va a dar igual prohibírmelo.
Cuánto tiempo, querido. ¿Un sueño? Vaya, qué curioso.
Ah, que estabas allí. Ya ves, qué cosas tiene el mundo.
Me gustan tus consejos. Si fueran más prácticos me gustarían más.
Tus notas. Comparémoslas con las mías. Yo tengo en todo NP.
Buenas noches, entonces. Sí, sí, hasta que me dé la venada otra vez.
Tienes que ver esa película. ¿Capaz o incapaz?
Mi turno, genial. ¡Placaje!
Tú, ¿quién eres? Ah, vale, que no te conozco.
Caro carísimo, ¿eh? Qué ADV.
¿Mi turno otra vez? Asesinas en serie. Sardinas. Wow.
Internet no mola, qué le vamos a hacer.
Abandonista. Me dejas sola. Mañana estoy aquí otra vez, sí.
¿Tú también te vas? Queda poco para vernos. Ciao!
Internet sigue sin molar. Ahám.
No te empeñes en mantener vivo algo que está en punto muerto. Sí, voy por el 12.
Decido recoger el campamento base. ¡Eh, que me estoy despidiendo!
¿Cómo lo haces? Me refiero a esa última sonrisa. Venga, te la dedico.
Desconectando. Desconectando. Desconectado.
1

Tell me

Imagina por un momento que caminas por un pasillo enorme, avanzando hasta el otro lado. El pasillo está compuesto por celdas. En las celdas hay gente, gente atrapada, sin agua ni comida, gente que se aferra a lo único que les queda: gritar. Yo soy una de esas personas. Imagina que no sólo no pretendes ayudarme, sino que te detienes para mirarme, para regodearte en tu libertad, esa que no tengo. Y yo sólo puedo gritar. Ahora, ponte en mi lugar. ¿Te lo imaginas? Bien, contéstame, con sinceridad: tú, ¿qué dirías?
1

The End

Se acerca el final, ahí está, lo veo. Ey, no será feliz, pero es un final. El final de una etapa bastante extraña. Me consuela el hecho de que he aprendido bastante. ¿Cómo terminará? Lo sé sin querer. Es como si alguien me hubiera hecho un gran spoiler desde el principio. Caminaba de espaldas a un "ni lo sueñes, pequeña, esto no es para ti". Me he girado, y voy a encararlo, por fin. Es un alivio. Ya no le tengo miedo a las consecuencias. Me gustaría decir que incluso no me importan, pero eso no podrá ser así. Claro que me importan, y mucho. Al fin y al cabo, tú me sigues importando y eso no va a cambiarlo nadie. Pero me repito más que el ajo, y estoy cansada de todo esto.
La cagué. Me arrepiento. No tendría que haber pasado, así lo demás tampoco habría pasado. O sí, pero no de esta manera. O igual no tiene relevancia y habría pasado exactamente lo mismo, yo qué sé. Sólo sé que llevo todo este tiempo torturándome a mí misma por un error que no voy a poder cambiar. Y eso es absurdo, sobretodo si tenemos en cuenta que a ti te da lo mismo. Así que voy a dejar de pensar en ello. Y si te tengo que sacar de mi cabeza a palazos, lo haré.
No duele como antes. Es esa maldita inocencia innata en mí, esa personalidad infantil y confiada, la que hace que resurja de la nada esperanza, la que me hunde en la mierda constantemente. Es hora de ponerle remedio.
0

A new little me

Arranco todas las hojas vacías de la agenda que quedaron atrás, y empiezo a llenar las nuevas. Están por venir tantos buenos momentos, tantos planes, tanta gente a la que conocer y tantos lugares que ver. Resulta imposible aburrirse. Puede parecer abrumador, pero así es como me gusta mi agenda: llena de cosas por hacer. Me gusta tanto planificar hasta el último detalle como que el más pequeño de los detalles se descontrole y dé un resultado tan radicalmente distinto que haga que el plan se vuelva improvisación, algo impredecible que ocurre y que no se repetirá, y disfrutarlo. ¿Y a quién no? Es darle vida a la vida. Y así es como me gusta mi vida.
- Just a new little me.
1

Conversación

Un triste hola, qué saludo más monótono.
Monotonía en la que me pierdo.
Perdida, sin control, sin conocimiento.
Conociendo un poco más el mundo que me rodea.
Rodeada, acorralada, me siento sin respiración.
Respirando en la distancia tu dióxido de carbono.
Carbonizo tu existencia con una mirada.
Miro casi sin querer.
Quiero desaparecer, que desaparezca esta rareza.
Qué raro, me has hablado.
Háblame de tonterías, relájate, sólo soy yo.
Yo, entiéndeme, o por lo menos escúchame.
Escucha esos crujidos, sí, mastico arena.
Arena del desierto con marea.
Mareada, aturdida, olvida de una vez ese momento.
Momentos de tensión, te callas, te excusas, fin de la conversación.


Parece increíble que el resultado sea siempre cero.
1

Paso

¿Dónde está? Lo recuerdo, pero ahora no lo encuentro. Ni siquiera lo busco. Estuvo, pero ya no. ¿O sigue estando, sólo que no lo veo? ¿Será mejor así, vivir ignorando incluso esto? ¿Cómo estoy en este momento? Bien, ¿no? ¿Todo está bien? Tranquila, sí, vale, pero ¿bien? No lo sé. No quiero saberlo. Que sea lo que tenga que ser. Por ahora, no hay nada que pueda hacerme salir de este soporífero estado de simplemente estar. No quiero complicarme la vida, esta vez no. Me aterra ver más allá. Miedo, sí. Y no quiero tener miedo. Será mejor cerrar los ojos, no hacer caso del martilleo ni de los alaridos. No quiero sufrir, no quiero pensar más. No es que lo razone. Sencillamente paso.
2

Deux jours

Me siento in love con una pequeña tortura física. Cómo morir lenta y dolorosamente con la seguridad de que todo el mundo debería hacer esta locura una vez en la vida. Recomiendo subir hasta lo más alto, y encontrar ese pedazo de infancia que sin haber estado me olvidé allí transformado en una sólida y adornada realidad. Recomiendo dejarse cegar por las luces parpadeantes de lo que por casualidad se convirtió en un monumento reconocido a nivel mundial, ese que nunca me interesó conocer, ese del que fui incapaz de apartar la mirada. Recomiendo hartarse de cultura y viajar a New York sin salir de Europa. Incluso recomiendo aprender su endiablado idioma. Yo voy a hacerlo. Ven a la ciudad de la que renegué, y avísame, porque no sabes cuánto deseo volver. Es una pena que se haya acabado tan rápido. Esta tierra corre ahora en dirección contraria a la mía. Tierra avec enchantement.
Au revoir,
París.
2

Träumen

Cierra los ojos, pero no va a dormir. La oscuridad de la noche lo envuelve todo a su alrededor, excepto por un par de luces parpadeantes que proceden de algo sobre la mesa. Ella, ajena a ese espectáculo luminoso, decide ponerse a vivir. Elige su vida, y elige una vida diferente, una vida lejos de aquel cuarto en penumbra. Se emociona sólo de plantearse la infinitud de posibilidades que hay, y se siente abrumada por la inmensidad de todo, de absolutamene todo en comparación con ella. Es una niña pequeña con ganas de inventarse una nueva aventura. Diseña un mundo con sus propias normas, y juega a visitarlo para saltárselas. Así, noche tras noche abandona su cama para soñar despierta, hasta que irremediablemente se duerme, y añade a la oscuridad su respiración acompasada y tranquila que nada tiene que ver con lo que seguramente vive en ese instante.

La diferencia entre sus sueños de dormida y sus sueños conscientes determina cuáles son sus favoritos. El carácter indómito de los primeros, por muy sorprendentes y caóticos que puedan llegar a ser, y llegan a serlo, no se puede comparar con la característica principal de los segundos: su posibilidad de hacerse realidad. Y algunos cogen forma tan rápidamente que a veces llega a asustarse de lo cerca que está de vivirlos. Sólo tiene que ponerse a ello.

"Mundo, dame tiempo. Te prometo que valdrá la pena."
1

Cena para tres

Una cena para tres. Él, ella y ese brillo especial en sus ojos. En los ojos de ambos. Todo ha sido preparado hasta el más mínimo detalle: un poco de música, unas velitas que iluminan la estancia, un par de copas después de cenar... Está segura de que su risa se puede oír en todo el edificio, pero no le importa. No necesita nada más, absolutamente nada más. Así se siente inmensamente feliz. En ese punto en el que con una mirada, sin decir nada, se pueden entender. Es ese el punto al que ella quería llegar. En su cena ideal para tres.
Siguiente Anterior Inicio