0

Return

Abrió los ojos al oír el tintineo de unas cadenas. Unas cadenas ahora completamente rotas. Porque había dejado de creer en ellas. Había estado aprisionada por la nada. Sonrió, se sentía tan estúpida. Movió una mano lentamente, probándola de nuevo, y disfrutó de ese movimiento. No iba a detenerse ahí. Se levantó de golpe, haciendo crujir cada uno de sus huesos, notando el agotamiendo en cada uno de sus maltratados músculos. Pero le daba igual. Miró hacia arriba. Soltó una leve carcajada cuando tuvo que taparse los ojos por la repentina luz. Nunca antes le había molestado tanto la vista. Pero siempre es mejor ver. Y empezó a verlo todo claro, nítido. Realidad. Aspiró profundamente, para después gritar. Tal vez no tenía fuerza, pero sí todas las ganas del mundo. Y se oyó, resonó allí donde hizo falta. Ey, ya no estoy encadenada. Ey, ya he salido de este agujero. Ey...
- He vuelto.


Sí. Siempre es un placer estar de vuelta.

0 garabatos:

Siguiente Anterior Inicio